Favores de San Josemaría en San Luis

Mariela, de San Luis, le agradece que consiguió trabajo, recuperó dinero perdido, pudo superar problemas, asistir a un retiro; y también que su hija aprobó tres materias previas.

“Quiero agradecerle infinitamente a San Josemaria  y compartir con Uds. cuanto me ayuda en mi vida cotidiana”, nos escribió Mariela Di Chiacchio, de San Luis, Argentina el 4 de noviembre de 2010. “Le tengo infinito cariño y devoción y siempre me acerca a DIOS, en lo pequeño, en lo diario, y en lo grande e imposible ¡también! No dejen de rezarle. Ha estado presente en cada momento difícil de mi vida: personal, laboral...”.

A raíz de eso, la animamos a contarnos más cosas y aquí está su historia. 

“Les remito algunas situaciones personales, cotidianas, en que San Josemaría me ha  ayudado para poder resolverlas. Tal vez para muchos sean pequeñeces. Para mí han significado un profundo alivio cuando el Padre las resolvió. Me encuentro sola, con una hija de 16 años y a veces se hace un poco difícil... Pido disculpas si la redacción no es del todo adecuada al expresarme. 

Octubre/2008: Me quedé sin trabajo ¡y me sentí desolada!! Soy el único sostén de mi familia. Luego de rezarle incansablemente a Dios a través de San Josemaría, a los pocos meses se solucionaron las cosas y volví a tener trabajo.

Abril/2009: Perdí, en mi nuevo lugar de trabajo, el dinero ahorrado que tenía para pagar el salón donde íbamos a festejar el cumpleaños de 15 de mi hija. Le recé la estampa a San Josemaría con profunda devoción: apareció el dinero. Me lo trajo un compañero: lo había encontrado en el pasillo que va a los sanitarios (por donde pasa mucha gente, todo el tiempo).

Mayo/2010: No tenía dinero ni tiempo para ir a un retiro espiritual de la Obra, que se hacía en Mendoza. Recién comenzaba con nuevas funciones en mi trabajo y con un jefe que es una gran persona, pero sumamente exigente; temía que no me diera autorización para tomarme esos días. REALMENTE QUERÍA IR AL RETIRO. Con firmeza, con mucha fe, le pedí a San Josemaría:  "LLEVAME AL RETIRO. ENCARGATE DE TODO, POR FAVOR"... Pude ir sin dificultades.

Julio/2010: Mi hija tiene bajo desempeño escolar. Es muy buena, pero le cuesta un poco el colegio, como a tantos adolescentes de hoy. El año pasado se llevó tres materias previas. Le he rezado incansablemente a San Josemaría y en esa fecha aprobó la ultima materia previa que tenía. Ella estudió, pero seguramente San Josemaría tuvo mucho que ver. Hoy mi hija ha mejorado significativamente en el estudio.  

Octubre/2010: Se me extravió el módem que me había prestado mi jefe y tenía que devolverlo. Mientras lo buscaba y rezaba a San Josemaría me trajeron un paquetito a mi nombre; yo no prestaba atención a la persona que me hablaba porque estaba ocupada buscando por todos lados y rezando concentrada. La persona insistió en que la escuchara y en darme lo que me traía: era el módem. Lo había encontrado el día anterior.   

Mariela cuenta también su relación con el Opus Dei: “Todos los sábados colaboro dando el taller de cocina en el club de niñas "El Chañar". Y confiesa: “A veces la creatividad se agota después de poner tanta energía en el trabajo durante toda la semana…  Entonces le ruego a San Josemaría que me ayude pensando en qué podemos cocinar, que resulte una propuesta atractiva para las chicas, que sea sencillo y no lleve demasiado tiempo... Siempre logramos cocinar platos ricos, en poco tiempo. Y las niñas se van entusiasmadas y motivadas para volver al sábado siguiente. Siempre le ofrezco alegría y mucha voluntad para realizar la tarea”.

Mariela termina su relato escribiendo el texto en mayúsculas (que respetamos, transcribiéndolo tal como ella lo mandó): NO ME CABE DUDA DE QUE DIOS NOS ACOMPAÑA A MI FAMILIA Y A MI SIEMPRE, Y QUE SAN JOSEMARIA ME ACERCA A ÉL CADA DIA Y EN CADA DETALLE. 

Si querés contarnos algún favor que hayas recibido por intercesión de San Josemaría, escribí a info@opusdei.org.ar.