San Pablo y los primeros cristianos

Nuevo vídeo sobre las enseñanzas de San Pablo. Este mes, el profesor John Wauck habla sobre el afecto del Apóstol hacia las primeras comunidades cristianas (03’16’’).

"Que vuestra comprensión sea patente a todos los hombres. El Señor está cerca. No os preocupéis por nada; al contrario: en toda oración y súplica, presentad a Dios vuestras peticiones, con acciones de gracias" (Filipenses, 4, 5-6).

En los Actos de los Apóstoles y en las Cartas de San Pablo vemos la relación entre el Apóstol y los primeros cristianos. Esas primeras comunidades eran como el Apóstol las deseaba. En especial, se ve el cariño que San Pablo tenía por ellos. 

En su Carta a los Filipenses, se despide llamándoles: "Hermanos míos muy queridos, mi gozo y mi corona" Con frecuencia habla de sí mismo como su padre, como uno que se sacrifica por sus hijos. O dice que es como una niñera, que protege a sus niños de las herejías y las divisiones. 

Este amor era correspondido por los primeros cristianos. En los Actos de los Apóstoles se lee que San Pablo se despedía de los cristianos de Éfeso, y ellos le abrazaban, le besaban y lloraban mientras le acompañaban al barco, sabiendo que no le verían nunca más. 

También conocemos el retrato de las primeras comunidades cristianas tal y como San Pablo las deseaba: el Apóstol es muy claro cuando les señala que deben permanecer en la situación en que se encontraban cuando se bautizaron: es decir, como hombres libres, esclavos, circundidados o no... San Pablo dice: permaneced donde estáis, vivid vuestra vida como cristianos, donde sea que estéis. 

Cuando les da normas morales, habla de las situaciones en que los cristianos pueden encontrarse: como ciudadanos o siervos; como padres que cuidan de sus hijos, como maridos o como esposas, como patrones o como esclavos. En esas situaciones, San Pablo les anima a respetar la autoridad. 

Pero, al mismo tiempo, les invita a transformar esas situaciones en, podríamos decir, "escuelas" de virtudes cristianas, donde aprender a vivir con humildad y espíritu de servicio. También habla a los cristianos de la obligación de trabajar. No pueden ser "holgazanes", dice. "Quien no trabaje, que no coma", señala. Pero el término clave para entender qué esperaba San Pablo de los primeros cristianos, es la palabra "Santos". 

San Pablo llama "santos" a esos primeros cristianos; y esto para recordarles que, estén donde estén, sean patrones o esclavos, maridos o mujeres, jefes o siervos, están llamados a ser santos, a ser verdaderamente felices, santos, en esa sociedad greco romana. Éste es el mensaje que San Pablo transmite a los cristianos de hoy.


Vídeo publicado en 2009 con motivo del Año Paulino. El Año Paulino fue un jubileo convocado por el papa Benedicto XVI en conmemoración del bimilenario del nacimiento del apóstol Pablo de Tarso. Se celebró entre el 28 de junio de 2008 y el 29 de junio de 2009. Tuvo un marcado carácter ecuménico, según los deseos del pontífice.